¿Cómo afecta el estrés a nuestra salud bucodental?

En ocasiones, las emociones también afectan a nuestra salud bucodental ocasionándonos patologías que pueden afectarnos a nivel físico, provocándonos dolores, molestias e incomodidades.

Seguramente, en más de una ocasión has oído hablar del dolor de dientes por nervios o incluso puede que lo hayas sufrido. Esto se debe a que emociones como el estrés o la ansiedad nos generan alteraciones en nuestro sistema nervioso, lo que hace que, además de a nuestra salud emocional, acaben afectado a nuestra salud física.

Aunque pueda parecer que el estrés solo se traduzca físicamente en dolor de cabeza, lo cierto es que también puede afectar a nuestras encías, dientes y salud bucodental en general.

Por eso, cuando sentimos molestias en nuestra boca o dolores, también es recomendable que acudamos a un profesional de la ortodoncia. Este nos ayudará a determinar si nuestras patologías están relacionadas con las emociones que sentimos y cómo podemos aliviarlas.

¿Por qué el estrés afecta a nuestra boca?

Muchas personas tienden a asociar el dolor de dientes o de encías solo únicamente a la aparición de patologías como las caries. Aunque la principal causa del dolor de dientes es principalmente esta, también existen otras causas que pueden derivar en molestias dentales.

Cuando nos encontramos ante situaciones de mucha carga en el trabajo o a complicaciones en nuestras circunstancias personales, esto afectará directamente en la salud bucodental.

Existen cada vez un mayor número de estudios que avalan la afectación del estrés y la ansiedad a nuestro sistema inmunitario. La energía física y mental que empleamos en mantener el estrés a raya hace que nuestra boca se vea afectada, debido a una alteración en nuestras hormonas reguladoras.

Las alteraciones emocionales pueden crear graves alteraciones en nuestro sistema inmunológico, lo que también afectará a los microorganismos que existen en nuestra boca, haciendo que se produzca un desequilibrio entre ellos. Esto hace que se puedan desarrollar diversas patologías que afecten a la salud de nuestros dientes y boca en general y que debemos revisar y diagnosticar cuanto antes.

¿Qué enfermedades pueden ser consecuencia de los nervios en nuestra salud bucodental?

Dentro de las consecuencias que puede derivar un desequilibrio emocional en nuestra salud bucodental, podemos encontrar las siguientes patologías:

Bruxismo

El bruxismo es la patología más conocida de dolor dental. Es la enfermedad que se conoce como el impulso involuntario de hacer rechinar nuestros dientes de manera inconsciente, especialmente cuando dormimos.

Es probable que en alguna ocasión hayas sentido dolor en los dientes cuando has despertado. Esto se debe a que la tensión que acumulamos durante el día se manifiesta mientras dormimos apretando nuestros dientes y encías. Puede ser ocasional, debido a un momento puntual de estrés, o repetirse de manera continuada. Cuando tenemos episodios seguidos de dolor de dientes al despertar, o incluso también durante el día, es probable que estemos sufriendo bruxismo. Para aliviarlo, nuestro dentista creará una férula de descarga que evitará que rechinemos los dientes al dormir, liberando así la tensión acumulada.

Dolor en la articulación ATM

En la mayoría de las ocasiones esta patología viene derivada del bruxismo y de presionar nuestras encías de manera involuntaria, al acumular la tensión en la zona de la boca.

La articulación temporomandibular (ATM) es la encargada de conectar la mandíbula con el cráneo, permitiendo así el movimiento de nuestra boca. Esta articulación puede sufrir mucho cuando rechinamos nuestros dientes o acumulamos tensión en la zona de la mandíbula. Cuando esta se daña, hará que sintamos dolor en la zona de la mandíbula que puede extenderse en el cuello, cabeza e incluso en el oído.

Para ello, se colocará también una férula de descarga que evitará, al igual que con el bruxismo, que acumulemos tensión en la zona de la mandíbula.

Aparición de llagas

Seguramente te ha pasado que has sufrido la aparición de una llaga en periodos de exámenes o de estrés por el trabajo. Esto se debe a los desequilibrios emocionales que genera el estrés en nuestro cuerpo.

Afectará directamente a nuestro sistema inmunológico haciendo que nuestras defensas bajen, lo que alterará los microrganismos de nuestra boca y favorecerá la aparición de llagas en nuestras encías, lengua o labios.

Existen enjuagues bucales que pueden ayudar a aliviar las molestias de las llagas y a reducirlas rápidamente, pero también será recomendable el consumo de algún complemento vitamínico para devolver nuestras defensas una carga alta.

Sea cual sea la causa de nuestro dolor de boca, dientes o encías, lo más recomendable es acudir a un profesional de la salud dental para que nos de un diagnóstico preciso.

En Clínica Dental Mingari somos expertos en el tratamiento de afecciones bucodentales. Si quieres conocer más información sobre nuestros servicios, no dudes en contactarnos. Estaremos encantados de atenderte.

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